El técnico argentino Rubén Magnano lamentó este lunes quedarse sin trabajo tras fracasar en su objetivo de clasificar a Uruguay al Mundial de Básquetbol de China 2019 al perder ante Puerto Rico 65-61 en su última oportunidad para llegar al torneo mundialista.
"Me acabo de quedar sin trabajo porque mi contrato se terminaba ahora", sostuvo Magnano en rueda de prensa tras el partido disputado en el Coliseo Roberto Clemente de San Juan.
"Quedo agradecido plenamente por la selección de Uruguay y su matriz, que son los jugadores. Realmente agradecido porque lo han dejado todo. Uruguay es un país pequeño, de solo 3 millones de habitantes, apoyándonos todos. Hay que levantar la cabeza y mirar adelante", agregó.
Uruguay parecía que se iba a llevar la clasificación a China al ganar el primer periodo 19-9, pero Puerto Rico apretó en el segundo y ganó la primera mitad 32-26.
La escuadra local prosiguió dominando el partido, tomando su mayor ventaja de 13 puntos.
No obstante, Uruguay avanzó y se acercó a dos puntos en el cuarto parcial, pero Puerto Rico nuevamente reaccionó hasta llevarse la victoria.
"Uruguay vendió muy cara la derrota. Puerto Rico tuvo en sus manos jugadores con grandes tiros y montaron la balanza a su favor", reconoció Magnano.
"Al principio hicimos un trabajo encomiable en la parte defensiva, pero muy bajo el por ciento (porcentaje) de campo para un juego de este nivel. Eso también se denota en la derrota", añadió el técnico argentino en referencia a que su plantilla solo convirtió el 43 % de sus tiros de campo.
Será la novena ocasión seguida que Puerto Rico juegue en una Copa del Mundo.
Uruguay, por su parte, no pasa a un Mundial desde España 86.
Esto, sin embargo, no le quita el sueño a Magnano de que una próxima selección uruguaya logre clasificarse a un Mundial.
"Hay una gran intención de la selección de potenciar el básquetbol. Uruguay es un país pequeño, donde el fútbol es el universo y otros trabajan quijotestacamente para el baloncesto. La dirección tiene que mirar adelante para ello", afirmó.
Magnano guió a Argentina a una medalla de plata en el Mundial de Indianápolis 2002 y oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Por su parte, Mathías Calfani, dijo sentirse triste por la derrota, pues tenía la ilusión de poder clasificar a la selección celeste por primera vez a un Mundial después de 33 años.
"Hasta el último segundo creíamos que podíamos. Ver cómo un país creyó y empujó (...) eso deja mucho. Duele mucho perder, pero mejor luchar al final que quedarme parado", puntualizó.
EFE
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