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¿Nacional necesita a Diego Polenta en este momento?

Con una sólida zaga compuesta por Corujo y Carvalho, ¿qué podría aportarle Polenta al equipo?
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24 de junio de 2019 a las 18:49

El rumor es fuerte. Diego Polenta se reunió semanas atrás en Montevideo con el mánager general de Nacional Iván Alonso y le planteó sus ganas de regresar al club, pese a que tiene contrato vigente con Los Ángeles Galaxy. Oficialmente, los dirigentes tricolores consultados por Referí no confirmaron esta información.

En mayo Referí entrevistó a Polenta quien dijo que había salido de Nacional porque ya había cumplido un ciclo, aunque aclaró que no se fue mal y que en su mente estaba volver: "El sentimiento es que nos teníamos que dar un tiempo con Nacional, lo necesitábamos los dos. Yo lo necesitaba para volver con la mentalidad y las ganas de siempre", expresó. La pregunta es: ¿Nacional necesita a Polenta en este momento?

Haciendo una revisión histórica, Polenta llegó a Nacional para la temporadas 2014/2015 cuando Álvaro Gutiérrez fue confirmado como entrenador, después de estar tres partidos como interino. El entrenador pidió un zaguero con experiencia y llegó Polenta, que aunque tenía 22 años de edad, poseía un recorrido de varios años en el fútbol italiano. Su estado físico no era el mejor, por lo que empezaron jugando Rafael García y Guillermo De los Santos. Lo hicieron en las primeras tres fechas, pero tras perder 2-1 contra El Tanque Sisley, Gutiérrez incluyó a Polenta junto a Rafa García como centrales y fue un éxito. Durante siete partidos seguidos el tricolor no recibió goles. Nacional fue campeón del Apertura y Campeón Uruguayo, venciendo en la final a Peñarol.

El año en que debutaron Gutiérrez como técnico albo y Polenta como jugador, levantaron la copa.

Donde falló Polenta y fue criticado por eso, fue en el ámbito internacional. En la Copa Libertadores de 2015, en la que Nacional quedó eliminado en la primera fase frente a Palestino de Chile, resultó expulsado a los 35 minutos del primer partido y la Conmebol lo sancionó con dos encuentros; en la Sudamericana del mismo año resultó expulsado a los 2 minutos del partido de ida contra Independiente Santa Fe.

Sin embargo, con el paso de los años (estuvo cuatro en Nacional) se constituyó en un jugador importante para el equipo y para el plantel. Lo nombraron capitán por su personalidad y fue un referente para sus compañeros y un ídolo para los hinchas. En el Uruguayo Especial 2016 volvió a levantar la copa del torneo local.

El déficit mayor estuvo en las expulsiones. Recibió varias veces las tarjetas rojas y en partidos importantes. Arrancó la Copa Libertadores 2018 con tres partidos de suspensión por una roja en 2017; en el Torneo Intermedio resultó expulsado en la final contra Torque, último partido que jugó con la camiseta de Nacional, el 10 de junio de 2018. Durante esos meses formó dupla con Guzmán Corujo, hasta que éste se lesionó.

La defensa está

En el arranque de la actual temporada el técnico Federico Domínguez no encontró una zaga que le diera solidez al equipo. Hasta que llegó Gutiérrez y desde el primer partido armó la zona central de la línea de cuatro con Corujo y Felipe Carvalho. Ninguno de los dos había jugado con Domínguez, pero con Gutiérrez blindaron la defensa.

Corujo, un jugador del club, ya había dado muestras de su valía en 2018 antes de lesionarse gravemente. Carvalho llegó este año y desde que entró al equipo se ganó el corazón de los hinchas, pero la forma de jugar y por la personalidad. El tercer zaguero del plantel es el argentino Marcos Angeleri, que no ha tenido un buen rendimiento. Después están Rafael García que puede jugar de zaguero pero es utópico pensar que Gutiérrez lo quite del mediocampo y Matías Viña, más utópico aún pensar que pueda salir del lateral izquierdo, donde tuvo un rendimiento formidable en los últimos meses.

¿Dónde encajaría Polenta entonces? Descontando que Gutiérrez dé el visto bueno para su llegada y que mantenga el sistema de línea de cuatro, en este momento el lugar de Polenta sería el banco de suplentes. Otra posibilidad es que pase a jugar con tres zagueros, o que Viña sea transferido y que Polenta juegue en el lateral izquierdo, donde ya actuó algunos partidos en Nacional y también lo hace en Estados Unidos.

Hay que ver si Nacional, que está cuidando su economía a rajatabla, está en condiciones de hacer el esfuerzo por un zaguero, cuando quizá necesita más uno o dos jugadores de mitad de cancha hacia adelante. Anímicamente, eso sí, la llegada de Polenta sería un golpe de efecto importante.

 

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