Actividades extraescolares, tendencia a nivel mundial

Es cierto que los niños escolarizados están cada vez más presionados y exigidos a nivel curricular. Se trata de una tendencia mundial que preocupa a padres e instituciones: cada vez son más valoradas las escuelas bilingües, la asistencia en doble turno y la escolarización temprana. Cada familia adopta una postura sobre la educación y la primera formación de sus hijos en pos de brindarles una atención integral en su cuidado y desarrollo. En la etapa de formación de los niños, sus aciertos y errores afectan de manera directa a su desarrollo integral y el manejo de la confianza y autoestima. Y, si el niño no dedica parte de su día a una actividad fuera del aula, su margen de aprendizaje se limita a la escuela. En todo el mundo son varias las organizaciones y los centros dedicados a la educación que defienden la importancia de la práctica de actividades extracurriculares.

Lucía Carriquiry

Lo teórico

Uno de los precursores en defender las actividades extracurriculares fue Howard Gardner, psicólogo, investigador y profesor de la Universidad de Harvard, que en 1983 publicó un modelo de concepción que destaca la diversidad de inteligencias que dispone la mente humana. El autor descarta

la existencia de una única capacidad global en común entre los individuos, establece que cada persona goza de una destreza personal que desarrolla a medida que la ejercita, y pone foco en las actividades fuera de clase. Según Gardner, existen varios tipos de inteligencias: lógico-matemática (habilidad para el razonamiento complejo); lingüística (dominar el lenguaje y la comunicación); corporal –o kinestésica– (utilizar el cuerpo para aprender y para expresar ideas y sentimientos); musical (saber utilizar y responder a los diferentes elementos musicales); intrapersonal (comprenderse a sí mismo y utilizar este conocimiento para operar de manera efectiva en la vida); interpersonal (habilidad de interactuar y comprender a las personas y sus relaciones) y naturalista (pensamiento científico). Identifica, por lo tanto, hasta ocho tipos de inteligencias distintas. Y, a partir de esto, percibe a las actividades extracurriculares como una herramienta que contribuye en el proceso de aprendizaje y autodescubrimiento del individuo. La educación dentro de las aulas se empeña en desarrollar la inteligencia lógico-matemática y lingüística, pero –en la mayoría de los casos– deja por fuera otras inteligencias que pueden ser decisivas para el desarrollo del niño.

Números condimentados

En Estados Unidos funciona Understood, una herramienta digital diseñada a partir de varias técnicas para las personas con dificultades de aprendizaje y atención. Understood está conformada por un conjunto de 15 organizaciones sin fines de lucro comprometidas a apoyar de manera directa a familias en el proceso de aprendizaje de los niños. Entre estas organizaciones se destacan las tan reconocidas Child Mind Institute, Poses Family Foundation, Reading Rockets, OAK Foundation y el National Center for Learning Disabilities.

Understood está formado por un grupo de destacados profesionales en las áreas de educación, psicología y medicina y, a raíz de una investigación realizada en 2200 familias, desarrollaron distintas herramientas digitales de aprendizaje que permiten la ejecución de técnicas orientadas a niños y jóvenes con dificultades de aprendizajes y atención. Entre estas, se encuentra Guía de decisiones: buscador de tecnología y entrenamiento para padres, una herramienta en formato online y con contenido interactivo –en español e inglés- que pretende acompañar a las familias en el proceso de aprendizaje. La estadounidense Kristy Baxter, quien conforma parte del equipo de docentes de Understood y que tiene una destacada carrera en el mundo educativo, defiende que las actividades extracurriculares están directamente vinculadas con la mejora de la autoestima del individuo. En consecuencia, sostiene que enfocarse en las destrezas, promover asignaturas que sean de disfrute para el niño y el fomentar la práctica de actividades sin obligatoriedad son distintos matices que ayudan al desarrollo y al proceso de aprendizaje de los niños.

Según Undestood, la creatividad y el disfrute son los ingredientes claves para conseguir un buen nivel en las actividades extracurriculares y obtener buenos resultados –como el desarrollo de la autoconfianza y de la autoestima–. Por ejemplo, según la organización, un matiz para enseñar matemática (el gran desafío para la mayoría) puede darse de forma lúdica, a través de distintas labores: cocina, venta de productos caseros, deportes, juegos de mesa; o actividades que impliquen manualidad como carpintería, tejido o aprender a tocar instrumentos musicales. Entienden que este tipo de acercamiento a las matemáticas, en conjunción con el resto de las pautas y prácticas, pueden ayudar al desarrollo integral del estudiante.

Lucía Carriquiry

Vecina orilla

Otra apuesta bajo la misma línea se da a nivel público en Argentina, donde desde hace ya 10 años funciona el programa Instancias Educativas Complementarias. A través de la propuesta, 14.000 niños y jóvenes participan en actividades extracurriculares vinculadas a idiomas, ciencias, música, artes plásticas, teatro y natación. El gobierno de Argentina destaca también que, en el año 2018, en 43 municipios de la provincia de Buenos Aires se lanzó el plan nacional Asistiré, donde se trabajó en conjunto con 220 escuelas y 4.563 estudiantes, según fuentes del gobierno. El programa fue diseñado con el fin de garantizar el derecho a la educación para adolescentes y jóvenes; y como estrategia de prevención temprana de deserción educativa. Se trata de medidas que acompañan las herramientas de formación, con actividades fuera del aula.

Tendencia local

En Uruguay hay una tendencia marcada hacia el desarrollo de las actividades extracurriculares. Varios centros educativos privados impulsan la práctica y las incluyen en su propuestas con el fin de elevar el nivel de formación de sus alumnos. El Colegio y Liceo Alemán basa su modelo de educación en la tesis de las Inteligencias Múltiples de Howard Gardner, mencionada anteriormente. El desafío que se plantea la institución es brindarles a sus alumnos una formación completa, atacando la formación no solo dentro del aula, sino también abordar la educación desde las asignaturas de índole creativa. Entre las actividades que propone se encuentran manualidades, arte, teatro, carpintería, entre otros. 

Otro caso que promueve con honores las actividades extracurriculares es el Liceo Francés. Con más de 120 años de experiencia, categoriza su propuesta en dos ramas: por un lado actividades deportivas y por otro las de perfil cultural. En la primera categoría se encuentran el fútbol, handbol, rugby; básquetbol, e incluyen también gimnasia rítmica y karate do. En lo que refiere a lo cultural se enfocan en artes plásticas, comedia musical, danza, teatro, idiomas y juegos en general. Por consiguiente, la institución registra los beneficios de este enfoque educativo y los absorbe para brindarles a sus alumnos un lugar donde se incentive la superación personal y el descubrimiento de aptitudes, que será decisivo para su vida adulta.