“Estamos satisfechos con los resultados económicos”, dijo este viernes la presidenta de Ancap, Marta Jara. La petrolera estatal presentó el balance correspondiente al ejercicio 2018, que dio ganancias por US$ 88 millones, más que duplicando su utilidad de US$ 39 millones registrada en el año anterior.
El resultado se explica por un precio del crudo en promedio más bajo que el proyectado y ahorros de funcionamiento. Según la empresa, el mayor resultado obtenido se ha trasladado a una reducción del objetivo de rentabilidad para este año y fue tenido en cuenta en el último ajuste de enero 2019.
Jara dijo que en enero la tarifa se mantuvo, a pesar que el costo del crudo subió y que los descuentos que se realizan desde el precio de venta al público por conceptos de impuestos y bonificaciones también aumentaron. Añadió que eso muestra “una mejora en la eficiencia” que “se está trasladando a la tarifa”.
En 2018 la firma estatal completó su tercer año consecutivo con números positivos tras ganar US$ 15 millones en 2016 y US$ 39 millones en 2017. Entre los ejercicios 2011 y 2015 el ente había acumulado pérdidas por unos US$ 800 millones. Eso llevó a que el Estado aprobara una millonaria capitalización por US$ 623 millones en el comienzo de 2016.
“Estamos en una situación en donde las eficiencias que logramos las empezamos a trasladar a las tarifas. (…) Estamos en una situación sólida. No estamos apuntando a grandes ingresos porque eso de alguna forma sale de la tarifas. Lo que necesitamos son ingresos que nos permitan cubrir razonablemente nuestros costos y afrontar las inversiones que nos permitan estar en los estándares que tenemos que tener”, apuntó Jara.
Según la empresa, entre 2016 y 2018 el aumento promedio de las tarifas fue de 14% y en ese mismo período el aumento del costo del barril medido en pesos fue de 66%. “Las tarifas suben en menor medida que los costos y los resultados mejoran. Esto se debe a ahorros y eficiencia”, afirmó el gerente general Ignacio Horvarth durante la presentación. También informó que si en vez de refinar, Ancap hubiese importado el combustible en 2018 el gasto hubiese sido de US$ 124 millones más, de acuerdo a la metodología de cálculos que utiliza el ente.
De todas formas, Uruguay mantiene precios de combustibles superiores al de los países de la región.
En 2018 mejoraron todas las líneas de negocio de la empresa (combustibles, lubricantes, gas natural y pórtland). De todas formas, aunque disminuyó sus pérdidas en 28%, la división pórtland volvió a cerrar con un rojo que esta vez llegó a los US$ 7 millones. La producción bajó 13% por paros del sindicato durante 88 días y hubo menores ventas por quiebre de stock. Sin los paros la pérdida hubiera sido de US$ 5 millones.
El margen Ebitda (resultado antes de impuestos, intereses, depreciaciones y amortizaciones) fue de 12,4 %, superior al de 2017 que se ubicó en 7,4%.
De acuerdo a la presentación del balance, el grupo ANCAP-incluyendo subsidiarias- cerró el ejercicio 2018 con un resultado operativo positivo de US$ 163 millones. Eso fue contrarestado por pérdidas financieras de US$ 82 millones, asociadas al endeudamiento comercial y financiero en moneda extranjera. En tanto, las empresas vinculadas al grupo aportaron ganancias de US$ 21 millones en el último ejercicio.
Eso da un resultado antes de impuestos de US$ 102 millones. Si se le restan los US$ 14 millones de impuestos a la renta el resultado global es de US$ 88 millones.
El desempeño por empresas muestra que Ducsa sigue siendo el motor y tuvo ganancias por US$ 21,5 millones, Alur (US$ 10 millones), Carboclor (US$ 4,5 millones) y Gasur (US$ 1,1 millones). En el caso de Cementos del Plata cerró con un rojo de US$ 3 millones. Su actividad se vio restringida por falta de productos. En tanto, los volúmenes de venta de cal hacia Brasil aumentaron pero la evolución del real afectó los resultados.
Durante el año pasado hubo ahorros estructurales por US$ 25 millones que se explican por la reorganización del trabajo, reemplazo del buque Ancap IX, implementación de medios de pago electrónico con eliminación de vales y cajas chicas, ahorros para el sistema de control vehicular para clientes estatales e iniciativas de eficiencia energética, entre otros, según la empresa.
Entre 2014 y 2018 años se redujeron gastos gestionables en 31%. Ese reportó una baja de costos de US$ 52 millones en el período.
En tanto la platilla de funcionarios se redujo 15%, lo que representa 445 funcionarios menos. Ese implicó una baja de costos de casi US$ 15 millones. También se redujo la cantidad de horas extras en 200 mil, lo que representó un ahorro de US$ 3,8 millones.
Según Horvath, la reducción de la plantilla y de horas extras no ha afectado la producción. La producción aumentó a un nivel récord de 16 millones de barriles en 2018. Entre 2014 y 2018 la eficiencia medida en horas trabajadas sobre capacidad instalada mejoró 27%.
En tanto, los números muestran que al cierre del año pasado la deuda del Ancap y Alur ascendía a US$ 1.014 millones. Durante el año se cancelaron deudas por US$ 78 millones.
El gerente financiero de la empresa Gustavo Mayola resaltó la mejora de liquidez que ha tenido la empresa. En 2015 Ancap tenía por cobrar $ 46 de cada $ 100 que tenía que pagar el próximo año. Hoy esa relación es de $ 154 por cada $ 100 que debe abonar el año entrante. También destacó que la rentabilidad sobre patrimonio fue positiva por tercer año consecutivo y pasó de 5% el 11%.
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