El día que 19 manos en la AUF deciden la suerte de 3.000.000 de apasionados por el fútbol

De mi mayor consideración:
Como bien habrán comprendido, las vueltas del fútbol uruguayo y las exigencias de FIFA, la caprichosa dueña del espectáculo deportivo más importante del planeta y las absurdas defensas de poder de muchos de ustedes, colocaron a la centenaria AUF en el peor escenario que podría esperar, a dos días de sufrir una histórica suspensión de afiliación de FIFA, con todas las consecuencias que vienen atadas a esa decisión.

Durante los últimos tiempos, la mayoría de ustedes terminaron de dañar los resquicios que sostenían una organización vetusta y comprometida por mezquinos dirigentes que, respondiendo a intereses económicos, fueron minando un camino en lugar de regar el crecimiento para fortalecer a una asociación que, inexplicablemente para el mundo, tiene a tres de los mejores jugadores del planeta y que históricamente se encargó de formar clubes y futbolistas campeones de América y del mundo.

FIFA, arbitrariamente y fiel a su forma de manejar los temas, decidió poner un pie sobre ustedes. Deberían aceptar, también si realizan una profunda autocrítica, que hicieron todo lo posible para que esto sucediera. Y como buenos inconscientes que son, no sé si por incapaces, orgullosos, rebeldes u obsecuentes, se plantaron ante un monstruo con una irresponsabilidad injustificable.

Entiendo las luchas de poder que los expone a ustedes -que terminan siendo víctimas u oportunistas en todo esto-, y los intereses económicos que hacen de ustedes, los de los dos lados, tristes títeres.

Acá no hay buenos ni malos. Aquí hay intereses económicos y poder político que contaminaron todas las decisiones.

Hoy ustedes tienen que resolver si aprueban el estatuto que propone FIFA y que impulsa una incalificable, impresentable y desorganizada Conmebol, incapaz de organizar una final de Copa Libertadores y que tiene que llevarla a Europa, en otra demostración de tercermundista. Demás está decir que Alejandro Domínguez acaba de inmolar las aspiraciones del Mundial 2030. Pero ese, el del Mundial, será otro asunto, que en algún momento Uruguay deberá resolver, tomando distancia de la Conmebol para recibir un merecido reconocimiento al centenario de aquel primero. 

Lamentablemente debo expresarles que por suerte Nacional y Peñarol resolvieron que en una medida antidemocráctica –pero la única capaz de sacar a todos los clubes que con ese voto que tienen en la asamblea hunden a toda la AUF–, exterminarán a todos aquellos de ustedes que estén dispuestos a hacer estrellar a la Asociación por lo que entiendo es un capricho de hacer implosionar como si se tratara de un juguete sin valor.

Nacional y Peñarol ya tienen decidido para el lunes generar una nueva AUF, si hoy no prima el sentido común.

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Estimo que, a pesar de que seguramente no se dan cuenta del lugar que ocupa cada uno de ustedes, la asamblea de esta noche recorre caminos tan absurdos como que El Tanque Sisley, que no juega fútbol profesional, podrá decidir el destino de la AUF. O que clubes como Atenas y Boston River, que en el partido que jugaron en el Parque Artigas de Las Piedras vendieron 68 entradas en el Apertura, o Torque y Boston River 66 en el Intermedio, puedan decidir el futuro de una institución histórica, ignorando la influencia de OFI y su peso de medio país. 

Que reine el sentido común y que cuando esta noche levanten la mano lo hagan con el convencimiento que eligieron lo mejor pensando en el crecimiento del fútbol uruguayo y no en el capricho de seguir jugando a decidir los destinos de fútbol como si se tratara de un juego didáctido, en una reunión de sábado de noche entre amigos.

¡Mucha suerte!