¿Cómo construir equipos más innovadores?

Bueno, vamos a ordenar algunos temas y a enfocarnos hoy a nivel de persona. En otra ocasión hablaremos de equipos innovadores.

Es un buen comienzo porque los equipos innovadores se componen de personas innovadoras, pero ¿cómo son esas personas? ¿hay características en común? ¿puedo desarrollar esas características aunque no me salgan tan naturalmente?

Comencemos con una historia.

El Dr. Orestes Fiandra fue responsable, junto con el Dr. Roberto Rubio de implantar el primer marcapasos autónomo, aquí, en 1960. Años después, fundaría el Centro de Construcción de Cardioestimuladores, que fabricaría los dispositivos médicos.

Pero resulta que el Dr. Fiandra iba a ser Ingeniero originalmente, y para cuando comenzó a estudiar medicina, ya había acumulado muchos conocimientos de ingeniería eléctrica. Ellos le resultaron de utilidad para la electrocardiografía, y también para sugerir al fabricante del primer marcapasos una serie de innovaciones clave que le permitieron ser autónomo.

Con un pie y medio en la cardiología y el restante medio pie en la electrónica, el Dr. Fiandra siguió realizando una serie de innovaciones a distintos niveles. Y aquí hay un punto a atender: una persona con múltiples “profesiones” tiene mayor potencial de innovar.

Viviendo a caballo

La especialización profesional nos hace eficientes pero nos mete en una burbuja. Las personas que tienen o bien más de una profesión, o múltiples intereses en los que son capaces de producir, tienen una gran ventaja para innovar.

Ser capaz de producir es clave, ya que innovar es implementar, no sólo tener la idea creativa. Hay que ser capaz de hacer cosas concretas con tu interés y poner cosas nuevas en el mundo, aunque sean imperfectas. El Dr. Fiandra fabricaba radios a galena cuando estaba en el liceo.

Aclarado esto, es importante darse permiso a uno mismo para tener más de un área de competencia. Puede parecer ineficiente, porque ciertamente lo es, si lo miramos desde la eficiencia de la especialización. Pero es muy eficiente si lo miramos desde la capacidad de integración y orquestación de múltiples soluciones y perspectivas que requiere la innovación.

Por ejemplo, si yo quiero innovar en un servicio que utilizará la Inteligencia Artificial para ayudar a estudiar adultos que trabajan tengo que saber, entre otras cosas:

• Qué necesita la persona.
• Cómo trabajar con Inteligencia Artificial
• Cómo integrarla en una solución que ayude al estudiante
• Qué estilos de aprendizaje tienen los estudiantes y cómo acomodarme a ellos
• Cómo y a quién cobrar por el servicio
• Dónde instalar y cómo mantener el servicio
• Cómo promocionar el servicio

Entre otras muchas cosas, de distintas especializaciones (educación, ingeniería de sistemas, marketing, ciencias empresariales, etc.).

Un perfil ideal podría ser una ingeniera de sistemas con estudios en pedagogía. A caballo de ambas profesiones, podría navegar una innovación como esta.

¿Por qué manejar más de un área de conocimiento nos hace más innovadores?

1. El mundo no es la Facultad.

Las innovaciones son soluciones nuevas a problemas en general, viejos. Los problemas humanos (transportarse, conseguir pareja, dar mejor sustento a mi familia, etc.) no se presentan como materias compartimentadas del liceo. Su solución requiere integrar múltiples conocimientos de manera novedosa.

       2.Múltiples sistemas interpretativos

Ninguna idea que resultó en una innovación fue por accidente. Alguien tuvo que reconocer el hecho inesperado como un evento con potencial innovador. Un ejemplo célebre: el técnico de radar a quien se le derritió el chocolate en el bolsillo de la camisa y desarrolló el horno microondas. Fleming, quien no fue el primero en notar que la penicilina mataba bacterias y pero sí en pensar (y experimentar) en usarla para curar infecciones.

Tener múltiples sistemas interpretativos aumenta las chances que tengamos mejores ideas tomando prestados conocimientos de distintas disciplinas, que identifiquemos más oportunidades para innovar y que seamos más capaces de hablar productivamente con gente de distintas especializaciones en un esfuerzo de innovación.

Inquietud, curiosidad, y ejecución

Las personas innovadoras tienden a mostrar curiosidad e industriosidad. Muchas cosas les interesa y son capaces de aprender de ellas y hacer cosas concretas.

Si les interesa la electrónica, fabrican algunos circuitos, si les interesa la pintura, pintan y exponen, si les interesa la energía eléctrica, arman una instalación con un panel solar.

Y no les preocupa si es el mejor circuito, la pintura genial o la mejor instalación solar. No están compitiendo. No les preocupa la perfección que se espera del especialista. Están aprendiendo.

Lo bueno de esto, es que las características se manifiestan en esos hábitos de curiosear, aprender y experimentar; y cualquiera de nosotros puede desarrollar más de esos hábitos, aunque al principio no nos salgan naturalmente.

Date permiso

Así que date permiso a vos mismo y a tu equipo para aprender cosas diferentes, aunque parezcan poco relacionadas. Desde leer algo nuevo, hacer un curso en línea, hasta estudiar una Maestría.

Hablen con gente distinta, vayan a reuniones de otras profesiones, asistan a eventos donde se sientan sapo de otro pozo. Observen, reflexionen e integren lo aprendido con lo que ya saben.

Pero además, hagan algo. Produzcan con eso. Pónganlo en el mundo para ver cómo funciona. El que imagina es el creativo, pero el innovador es el que hace.

Entonces un primer paso para aumentar tu capacidad de innovación: desespecializate.