Desde la época de Ceferino Rodríguez que Nacional no cambiaba tanto de técnico

El domingo, Decurnex decidió cesar a Alejandro Cappuccio luego de que Nacional perdiera el sábado 2 a 0 con River Plate en la última fecha del Torneo Apertura donde finalmente quedó segundo a siete puntos del campeón Plaza Colonia. 

Esa cantidad de entrenadores es la misma que desfilaron por Nacional bajo la presidencia de Ceferino Rodríguez, quien condujo los destinos del club entre 1992 y 1997. 

La gran diferencia entre ambos ciclos fue que el de Rodríguez estuvo marcado por el quinquenio de Peñarol (1993-1997) mientras que el actual ciclo de Decurnex ha sido exitoso tanto en lo deportivo (bicampeón uruguayo 2018-2019) como en lo institucional donde se logró bajar drásticamente el presupuesto, se valorizaron muchos juveniles del club, se retomaron obras, se edificaron valiosas infraestructuras, se profesionalizó el fútbol femenino y expandió el branding del club.  

Decurnex ha defendido enfáticamente los cambios de entrenador a pesar de haber apostado en el inicio de cada temporada a un proyecto a largo plazo. Primero con Eduardo Domínguez (2019), después con Gustavo Munúa (2020) y ahora con Cappuccio (2021). La lógica última del resultado y la necesidad de un golpe de timón ambientaron los cambios y Nacional logró con los mismos los objetivos trazados en el plano local: ser campeón uruguayo. 

Por Domínguez llegó Álvaro Gutiérrez quien ganó el Clausura y fue campeón contra un desmembrado Peñarol ganando dos finales en cuatro días.

Leonardo Carreño

Desgastado por la campaña, el DT prefirió no seguir en 2020 donde el club apostó por el retorno de Gustavo Munúa. Las derrotas en las finales de la Supercopa contra Liverpool y del Apertura 2020 contra el Rentistas de Cappuccio hicieron que su ciclo fuera insostenible.

Diego Battiste

Jorge Giordano quedó como DT interino y la fuerzas de los resultados lo hicieron técnico definitivo. Pero el desplome del equipo en el final del Clausura (un 0-4 con Liverpool en el Gran Parque Central incluido) llevaron a Decurnex y su directiva a apostar por el entrenador de la Tercera, Martín Ligüera, para afrontar la recta final de ese Clausura y las finales del Uruguayo que fueron ante un Rentistas bastante disminuido con respecto al equipo que se había coronado en el Apertura. El tricolor terminó campeón. 

Leonardo Carreño

Cappuccio no hizo una mala Libertadores teniendo en cuenta el escaso tiempo de trabajo que tuvo para afrontar el torneo. Pero patinò feo en la Copa Sudamericana renunciando a su estilo de juego en el partido de local contra Peñarol y tuvo dos partidos tétricos en el Apertura que lo radiaron de la lucha por el título: Montevideo City Torque y Cerrito. 

Contra River Plate, el sábado, mereció mucho más en el primer tiempo (hasta erró un penal Gonzalo Bergessio) pero tomó dos goles en momentos claves (fin del primer tiempo y comienzo del segundo) que fueron un mazazo para el ánimo del equipo. La última imagen del Nacional de Cappuccio fue la de un equipo sin levante, sin reacción anímica.

Por eso el cambio. Porque Decurnex se aferra a que esos cambios le han resultado hasta la fecha. Y a eso se la juega en un Clausura donde espera darle caza a Plaza y seguir arriba de un Peñarol que distaerá fuerzas previo a dos o a lo sumo tres partidos por su participación en Copa Sudamericana donde está en semifinales. 

Los técnicos de Ceferino

Campeón uruguayo en 1992, Roberto Fleitas duró en 1993 hasta ser eliminado en octavos de final de la Copa Libertadores contra Olimpia que lo venció 2-1 en el Centenario y 3-0 en el Defensores del Chaco. Fue el primer entrenador de la era Ceferino Rodríguez, años aciagos para los tricolores.

A.Sartorotti

Fue sustituido por Miguel Ángel Piazza quien perdió los dos clásicos con Peñarol (0-1 y 1-3) cediendo el título en el Uruguayo y terminó goleado de local en la Supercopa por Flamengo (0-3) luego de eliminar a Racing y al Cruzeiro de Ronaldo con un memorable triunfo en Morumbí. 

A falta de cinco fechas para terminar el Uruguayo fue cesado por lo que Héctor "Chino" Salvá completó la temporada en el plano local. 

En 1994, Ceferino apostó por el argentino Eduardo Luján Manera, quien conquistó en enero la Liguilla y le volvió a ganar a Peñarol (3-1). 

Sin embargo, un repentino bajó en el Uruguayo con derrotas ante Basáñez (0-2), River Plate (1-3) y el clásico con Peñarol (1-2) le costaron el cargo. 

Su sustituto, en pleno Apertura, fue Hugo Fernández, entrenador que también fue cesado por perder un clásico contra Peñarol, el de la primera fecha del Clausura 1995 (0-1). 

Antes, Fernández había perdido el clásico del Clausura 1994 (1-2) y el de la Liguilla (1-2) ganando el del Apertura 1995 (2-1). 

Su subrogante fue precisamente el Chino Salvá quien enderezó el rumbo en el Clausura llegando a una final con Peñarol que ganó por penales. 

Pero en las finales por el Uruguayo perdió a pesar de haber ganado la primera final (1-0). No solo perdió las dos restantes (2-1 y 3-1) sino que también perdió ante Peñarol en la Liguilla (0-1) y en un amistoso disputado en febrero de 1996 en el Campus (1-3). Solo llegó a dirigir dos partidos en el Apertura 1996 (Central Español 2-0 y Cerro 2-2).

Ceferino apostó entonces por Miguel Ángel Puppo quien se sostuvo un año y cuatro meses en el cargo, manteniéndose pese a perder las finales del Uruguayo 1996 (0-1 y 1-1) en las que Peñarol ganó y quedó a las puertas del quinquenio. Antes había perdido el clásico del Apertura pero ganó el del Clausura. Después ganó 2-0 por la Liguilla y en la Libertadores de 1997 también perdió (1-4) y ganó (2-0). 

Fue campeón del Apertura 1997 a pesar de perder el clásico con Peñarol (0-2). Pero luego la racha se volvió adversa al ser eliminado por el tradicional rival en el grupo de Copa Sudamericana que compartieron con Vasco da Gama (2-2 y 1-2) por lo que sus tres primeros partidos del Clausura terminaron de tejer su suerte (derrota con River y empates con Rampla Juniors y Danubio). 

Roberto Fleitas, campeón de América y el mundo en 1988, fue la última apuesta de Ceferino para cortar el quinquenio de Peñarol. Pero el intento fue en vano porque el aurinegro le ganó en todas las canchas al tricolor: sin ganar Apertura ni Clausura (que fue ganado por Defensor Sporting) se metió en la definición del Uruguayo eliminando a Nacional en una semifinal donde le levantó un 2-1 que terminó en 2-3 y que se sumó a la lacerante derrota del Clausura donde el tricolor ganaba 3-1 y perdió 4-3. Para colmo, siguió como DT en la Liguilla y su último partido fue derrota 3-1 ante los aurinegros. 

Más estabilidad 

A partir de la llegada de Dante Iocco (1998-2000), Nacional logró estabilidad institucional y los entrenadores estabilidad deportiva. 

Por años fue frecuente ver a los técnicos del tricolor trabajar durante todas las temporadas para las que fueron designados, más allá de los resultados. 

Hugo De León, quien impidió el sexenio de Peñarol con un 1998 memorable, estuvo cuatro en el cargo siendo campeón urugayo en 1998, 2000 y 2001. 

Después solo fueron cesados Santiago Ostolaza en 2004, por Eduardo Ache, Daniel Carreño y Luis González por Ricardo Alarcón, Gustavo Díaz en el retorno de Ache y Gerardo Pelusso también en el último período de Ache tras perder el clásico del Clausura 2014 por 5 a 0. Es decir, que solo cinco técnicos fueron cesados en sus cargos en 21 años. 

Este es el listado completo de los entrenadores de Nacional desde la época de Ceferino Rodríguez a la de José Decurnex que camino a su tercer año de mandato ya cortó a cuatro entrenadores.