"El dinero no es nada más ni nada menos que el medio que nos permite lograr nuestros objetivos de vida"

Economía y Empresas > IEEM - Stephanie Shellman

El desafío del dinero y lo que hacer al respecto

Ahorrar e invertir son dos caras de la misma moneda y definir el rol que tiene el dinero en nuestra vida es fundamental para tomar las decisiones adecuadas
Tiempo de lectura: -'
05 de marzo de 2022 a las 05:05

Por Stephanie Shellman
Profesora del programa Finanzas Personales del IEEM

El dinero… A nadie le gusta pensar en él, pero es parte de todos los aspectos de la vida: nuestro sentido de la identidad, dónde vivimos y con qué cosas nos rodeamos, lo que queremos hoy y soñamos para el futuro. Todo ello tiene que ver con el dinero.

Si el dinero era importante antes, ahora lo es aún más. Nuestros abuelos y padres podían recurrir a sus seres queridos y a un sistema de seguridad social fuerte para financiar sus gastos cuando ya no pudieran trabajar más. 

Lamentablemente, ni nosotros ni las generaciones que nos siguen vamos a tener la misma suerte. Nuestras familias no tienen la misma seguridad que antes, el gobierno tampoco. 

Los cambios demográficos hacen insostenibles los sistemas tradicionales y el dinero para financiar todo, simplemente, no está. Cada uno de nosotros, de forma individual, tendrá que enfrentar el impacto diario de esto cuando se jubile. Tener el dinero que necesitaremos en el futuro depende de lo que hagamos hoy.

Entonces, ¿qué debemos hacer? La respuesta es sencilla: debemos ahorrar todo lo que podamos, empezar lo antes posible y luego aprender a hacer crecer nuestros ahorros de forma segura a través de la inversión. Sin embargo, ir del dicho al hechoes más complicado.

Claves para ahorrar e invertir

Para ahorrar hay que aprender a consumir en forma consciente, pero eso, a su vez, requiere de un aprendizaje previo: frenarse frente al impulso del gasto. Yo llegué a Uruguay en 1985 y, en ese entonces, la mayoría de los uruguayos ganaban menos que hoy, pero ahorraban más. ¿Por qué? Porque había menos cosas para comprar y como no había crédito al consumo era más difícil comprarlas. Hoy, uno puede comprar lo que quiera y ni siquiera es necesario tener el dinero.

Decimos que no podemos ahorrar, pero la verdad es que no estamos dispuestos a hacerlo, ello implicaría renunciar a gustos o compras con las que nos vemos tentados diariamente, siendo arrastrados por una cultura consumista que nos avasalla y, más aún, muchas veces anula nuestra capacidad de decisión. Frente a esta situación que nos alcanza a todos los que vivimos en la sociedad actual, se hace fundamental detenernos un instante a pensar qué estamos haciendo con nuestro dinero, si ese gasto refiere a una necesidad real o simplemente provocada por quienes quieren vendernos. Debemos frenar y preguntarnos: esta compra que estoy a punto de hacer, ¿qué es lo que me aporta y qué es lo que me quita? Poner en la balanza ambos
valores nos va a permitir descartar gastos innecesarios y así poder ahorrar más para el futuro.

Para hacer crecer nuestros ahorros, hay que aprender a invertir. Hace 30 años, invertir era fácil. Uno podía ir a un banco, entregar su dinero como depósito a plazo fijo y el banco prometía pagar una tasa de interés. Uno solo tenía que tomar dos decisiones: si depositaba en dólares o pesos (la cual era fácil porque nadie invertía en pesos) y el plazo (30, 90 o 180 días).

Hoy en día, los bancos no ofrecen pagar por los depósitos, sino que ofrecen diferentes “productos de inversión” a elección de uno. Para navegar este mundo más complejo, tenemos que aprender a invertir en forma segura.

No es necesario convertirse en un experto financiero para poder invertir. Muchas personas asumen que hay que ir a un curso especializado y aprender un nuevo lenguaje para poder invertir bien, pero no es así. Hay muchas actividades en la vida que manejamos sin convertirnos en expertos. No necesitamos ser cirujano para operarnos de la rodilla. Tampoco ser arquitecto para construirnos una casa. 

La sociedad humana está organizada sobre la premisa de que diferentes personas son buenas para diferentes cosas. Trabajando juntos se consigue mucho.

Gestionar nuestro dinero

Si pensamos en manejar nuestro dinero de la misma forma, es sencillo. Necesitamos poner nuestro enfoque en tres áreas: debemos entendernos a nosotros mismos. Nuestra relación con el dinero es multidimensional: nos permite comprar cosas que necesitamos, nos ayuda a expresar lo que somos y nos afecta emocionalmente.

Tenemos que definir lo que buscamos. El dinero no es nada más ni nada menos que el medio que nos permite lograr nuestros objetivos de vida. Hay un solo “experto” en cómo queremos vivir, nosotros mismos. Tenemos que preguntarnos “¿en qué se va a gastar el dinero que estamos ahorrando e invirtiendo?”, “¿cuándo lo vamos a gastar?” y “¿cuánto vamos a necesitar para lograr lo que buscamos?”. Después, debemos traducir estos objetivos financieros en un plan que nos ayude a alcanzarlos.

Necesitamos determinar con quién trabajar. Cuando construimos una casa tenemos claro quiénes son los que nos ayudan: el arquitecto, la barraca, los obreros, la empresa constructora, etc. Pero cuando pensamos en nuestro dinero asumimos, equivocadamente, que todos los proveedores financieros (los bancos, corredores de bolsa, asesores y otros) hacen lo mismo. Diferentes empresas ofrecen diferentes servicios y hay que entender lo que hace cada una para definir con qué tipo de experto necesitamos trabajar. También como consumidores tenemos que hacer las preguntas correctas y aprender a comparar diferentes alternativas.

Comprenderse a sí mismo en estas tres dimensiones es importante para entender por qué tomamos las decisiones que tomamos y dónde están los puntos ciegos.

Aunque no nos guste, vivimos en un mundo que exige que cada uno de nosotros tome las riendas de nuestra propia vida financiera. Es más sencillo de lo que parece si utilizamos las mismas habilidades que cuando nos enfrentamos a otros problemas complejos. No es necesario convertirnos en expertos financieros, pero sí en consumidores informados y conscientes. Debemos replicar lo que hacemos en muchos otros ámbitos de la vida: definir lo que queremos y contratar a expertos que puedan ayudarnos a lograr lo que buscamos.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...