Cartas de los lectores > OPINIÓN

El ejercicio permanente de la tolerancia

La intolerancia y la manija parecen estar en el orden del día
Tiempo de lectura: -'
15 de noviembre de 2018 a las 05:04

En estos días he leído con mucha atención algunas columnas de opinión de Ana Jerozolimski, con respecto a la presencia de Roger Waters a la sede de nuestro PIT-CNT.
Nos ha dicho que deberíamos decir con respecto a lo que vimos cuando estuvimos en Israel, invitados por la Histadrut, recordándonos las partes más convenientes de una entrevista que le concedimos, para sustentar sus opiniones contrarias a la presencia de este gran artista en nuestro local.

Ha intentado por todos los medios embarrar la cancha, dejarnos del lado de los que generamos odio o hacemos silencio por temor a no se sabe a qué demonio de la situación del conflicto entre Israel y Palestina, y de lo que vimos en Israel.
Me pareció inoportuno y hasta oportunista responderle en medio de la visita de tan célebre artista, que levanta la bandera de lucha contra personas de la anti política como Trump y Bolsonaro, que levantó la bandera de los familiares de los desaparecidos. Como muchos otros músicos y artistas, demuestran lo mejor de su construcción creativa, esa que provoca que cientos de miles de personas paguen su entrada para ver a un fenómeno que conmovió varias generaciones, y al mismo tiempo ser militantes de distintas causas que consideran vale la pena abrazarse. En nuestro país por suerte son muchos compañeros y compañeras que se han abrazado a las mejores banderas del movimiento obrero.

Dos organizaciones vinculadas al apoyo al pueblo palestino nos solicitaron en préstamo el local sindical para hacer una actividad con Roger Waters. Hicimos múltiples consulta y unánimemente resolvimos prestar el local y darle a Roger Waters la oportunidad de expresarse libremente, es decir defendiendo como siempre la libertad de expresión, salvo que esas expresiones apoyen al fascismo, cuestión que en este caso no solo no sucedió, sino por el contrario invitó a pelear contra el fascismo en el mundo.
Probablemente sería más sencillo quedarse disfrutando de sus éxitos, de su actual popularidad, pero elige un camino más complejo, el de enfrentarse a múltiples poderes. Obviamente esto genera múltiples resentimientos y hasta necedades, al punto de que escuchamos perplejos que no se le tendría que haber dado el título de visitante ilustre de la ciudad. ¿Acaso no es un visitante ilustre de nuestra ciudad de Montevideo? Yo creo que sí y que hizo bien la Intendencia de Montevideo en darle esa distinción y hago mía las palabras de Mariana Percovich, sobre lo que significó para nosotros la película “The Wall” y todas las cosa que había que hacer para poder verla.
La música y el nivel artístico de Pink Floyd como uno de las bandas más potentes de rock es indiscutible, como también su etapa como solista en la que logra colocar 40 mil personas en un Estadio. Una convocatoria así es para muy pocos en nuestro país.
Muchas de las posiciones que sustentó tanto en la Intendencia como en el local de nuestra central obrera yo las comparto en buena medida. Tengo una diferencia sobre los boicots, de hecho exprese mi opinión en el semanario hebreo, tal cual lo dice en su nota Jerozolimski, Allí sostenía que "Yo las experiencias que he visto de boicot han sido todas negativas. Porque quién paga finalmente no es el que tiene el capital, que de alguna manera u otra, va a reorientar su problema. El que lo termina pagando es el eslabón más débil, que no se puede mover, que lo único que tiene es su trabajo como centralidad de vida. Si el trabajo para los trabajadores es el salario, es el orgullo de poder llevar el fruto de su trabajo a su casa y compartirlo con su familia, es el trabajo de su esposa, es la construcción de una familia alrededor de una situación". Esta posición yo la sigo sosteniendo y cuando se trató el tema en el Ejecutivo de nuestra central, se compartió no apoyar un boicot por estos temas.

Lo mismo, pero en una dimensión gigantesca, comparada con una iniciativa civil, es el bloqueo salvaje que sufre el pueblo Cubano hace varias décadas y que solo votaron en la ONU, EE.UU. e Israel. Bloqueo que viene pagando el pueblo cubano con múltiples peripecias, como explicará Jerozolimski semejante barbaridad, porque la diferencia entre una iniciativa civil y una política de estado resuelta por EEUU para bloquear a Cuba y solo apoyada por el gobierno Israelí.
Entonces no parece ser tan coherente la posición sostenida por la periodista, quien parece sólo siente dolor con medidas tomadas contra su pueblo y parece sentir una enorme apatía cuando la medida es contra otros pueblos, por ejemplo con el pueblo cubano.
Nosotros le hemos prestado el local a estas organizaciones y pudieron decir lo que nos gustó y lo que no, porque creemos en la libertad de expresión. La libertad no es que la gente diga lo que nosotros queremos, es que todos puedan expresarse conforme a lo que piensan o sienten. Menos mal que esta libertad no está en manos de esta periodista, sino solo se podría analizar su punto de vista con respecto al conflicto.

Con respecto a la Histadrut, a todas las personas con quienes nos reunimos le trasmitimos todo lo que pensábamos en relación al conflicto del Medio Oriente, y esa posición es clara y contundente. Muchos miembros de la Histadrut nos manifestaron su acuerdo con nuestra posición.
Nuestra posición siempre fue darle oportunidad a las partes de expresarse con toda la libertad. “En ese cuadro político se ubica la situación de Palestina para la cual seguimos reclamando una solución al conflicto, el fin de las agresiones del gobierno israelí sobre el pueblo palestino, y el reconocimiento del Estado Palestino y de Jerusalén como capital compartida con el Estado de Israel tal cual lo resolviera en su momento las Naciones Unidas”  Resolución del XII Congreso del PIT-CNT.
En esa línea organizamos una actividad en las que participaron y dieron su opinión con total libertad, los señores Alejandro Hamed y Damián Szvalb.

Esta posición no es nueva, aunque sorprenda a la periodista, pero en la década de los 90, con varios dirigentes de la época, encabezados por el querido compañero Pepe D’elía recibimos a un enviado de Yahir Arafat, en una reunión que duró más de dos horas. Eso no era un impedimento para reunirnos con el Comité Central Israelita, o con las demás organizaciones judías en el Uruguay para conocer todas las opiniones.

La periodista está muy mal informada, y (es raro en un periodistas), el PIT CNT no convocó a ningún boicot hasta el momento, lo hizo el expositor Roger Waters y las organizaciones convocantes, por lo cual tiene un error de origen, no habernos consultado para conocer nuestro punto de vista.

Nosotros encontramos en Israel una organización potente, que garantiza un piso de derechos laborales muy altos, y lo expresamos en varias entrevistas, por las que fuimos duramente cuestionados por un pequeño grupo de personas que sostienen que la única verdad es la que ellos sostienen y los demás somos débiles ideológicos o bobos según el caso. Igual de grave que la posición de la periodista Jerozolimski, que considera que podemos ser traidores y o débiles por no comentarle al gran músico y activista lo que vimos en Israel y en verdad lo importante era escucharlo a él y sus posiciones.

Yo no comparto el 100% de las posiciones que él sustenta, pero sí una enorme parte, y me provoca admiración que la gente se comprometa con las causas de los más débiles, y más cuando tiene una situación de privilegio de acuerdo a sus ingresos.
Debería la periodista tratar conocer más al PIT CNT, porque hasta el último día de nuestras vidas, la libertad es un bien a preservar, entre ellas la libertad de expresión.

La intolerancia y la manija parecen estar en el orden del día, nosotros vamos a seguir levantando el internacionalismo de los trabajadores, y entre opresores y oprimidos nuestra posición va a ser colocarnos del lado de los oprimidos. Viene desde el fondo de nuestra historia, historia que hemos pagado con asesinatos, desapariciones, torturas y exilio, enfrentando con mucha dignidad al Terrorismo.
La casa del PIT CNT es de puertas abiertas y lo seguirá siendo, y no vamos a perder esta condición ni por empujones de una periodista, ni por presiones indebidas, porque no es un capricho, es una convicción.

Tal vez deberían ser coherente y reclamar al gobierno de Israel que no sea uno de los dos países que apoyan el bloqueo más largo y duro a un pueblo latino americano.

Fernando Pereira, presidente del PIT-CNT

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...