Un déficit fiscal de 4,7% del PIB es alto y riesgoso. Lo dicen los economistas privados cuando analizan las vulnerabilidades locales, lo enfatizó la oposición cuando todavía era oposición y en las gateras de un nuevo gobierno, lo reconoció la administración Vázquez desde el día en que asumió, aun cuando el rojo de las cuentas públicas era más acotado y sostenible.
Esta nota es exclusiva para suscriptores.
Accedé ahora y sin límites a toda la información.
¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá