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Las jineteadas: camino a desaparecer en la capital pero firmes en el interior
“La patria se hizo a caballo” es una de las frases que resurgen cada vez que la sociedad, o una parte de ella, discute si es necesario prohibir las jineteadas durante la Semana Criolla de Montevideo. El último en usarla fue el subsecretario de Turismo, Benjamín Liberoff, quien pidió en una entrevista con Radio Carve que no prime en el debate sobre el bienestar animal la opinión de aquellos que solo ven “los caballos en las calesitas”.
Como en cada edición, las jineteadas en la Rural del Prado se robaron el protagonismo de la Semana Criolla. Las muertes de dos caballos durante las jineteadas provocaron que la Intendencia de Montevideo (IMM) anunciara cambios para la próxima edición del evento, algo que será oficializado el próximo miércoles, según comunicó el intendente Christian Di Candia.
La actividad en Montevideo, sin embargo, es una vidriera que no es representativa de lo que pasa en el interior del país durante todo el año, sin el control de las autoridades ni la presión fuerte de las protectoras de animales.
Rita Rodríguez, integrante de la Coordinadora para la Abolición de las Jineteadas en Uruguay (CAJU), afirmó a El Observador que la organización que integra pone el foco en las jineteadas de Montevideo porque el ruedo de la Rural del Prado es el “más importante” y, además, porque si la capital dejara de financiar este tipo de eventos marcaría un “precedente” para las demás localidades.
En el interior, por ejemplo, hay jineteadas que se celebran para financiar emprendimientos educativos, una clara contradicción a los ojos de estas organizaciones. Para Rodríguez, fuera de la capital también hay “miedo” por parte de los activistas a manifestarse, ya que en esas actividades del interior se mezclan muchos intereses, dijo.
Las destrezas criollas, entre las que se incluyen a las jineteadas, fueron declaradas de interés nacional en 2006, a instancias del entonces diputado del Partido Nacional (PN), hoy precandidato a la Presidencia, Luis Lacalle Pou. Esa ley es la que la CAJU quiere derogar juntando firmas para hacer una consulta en las próximas elecciones departamentales. “Es una forma de hacer activismo de concientización, charlar con la gente, explicarle por qué es necesario derogar esta ley y dejar en la historia un espectáculo como el de las jineteadas. Que el campo de nuestro país sea identificado por sus mejores tradiciones, aquellas que no son violentas”, explicó Rodríguez.
Pero, más allá de lo que pueda determinar la IMM, que tiene todas las opciones sobre la mesa –como prohibir de forma definitiva las jineteadas en el Prado-, desde 2009 existe un organismo estatal encargado de controlar el bienestar animal y la tenencia responsable. La Comisión Nacional Honoraria de Bienestar Animal (Cotryba) que funciona en la órbita del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) fue aprobada por la ley 18.471 en abril de 2009. Sin embargo, ese organismo es un mero espectador en lo referido a las actividades ecuestres.
El gerente de la Cotryba, Julio Pintos, explicó a El Observador que el control que ejerce el organismo en la Semana Criolla se limita a la participación de una técnica veterinaria invitada por la IMM para observar cómo se desarrolla la actividad. No se hacen controles sanitarios ni de otro tipo sobre los caballos que compiten en el ruedo. La presencia de la Cotryba comenzó en 2018 y esta fue la segunda edición en la que participó.
A nivel nacional, en tanto, el organismo no tiene ningún mecanismo previsto para desplegar personal ni cuenta con un cuerpo inspectivo que visite las actividades ecuestres que se organizan cada fin de semana fuera de Montevideo.
“Las jineteadas son legales. Las instituciones que las organizan, como la IMM, lo que hacen es tratar de regular y avanzar en las condiciones de bienestar”, afirmó Pintos y agregó que la única institución organizadora de criollas que se ha “preocupado” por estos temas ha sido la comuna capitalina. Pese a que la ley le asignó como cometido velar por el bienestar de todos los animales, para Pintos los caballos no son una “prioridad” de la Cotryba. “Lo que pasa es que, más que nada, estamos enfocados en la superpoblación canina”, señaló el gerente.
Los activistas apuntan contra la Cotryba
El diputado suplente del Partido Nacional (PN), Gastón Cossia, afirmó a El Observador que la Cotryba es “inexistente”. “No tendríamos que estar esperando a ver qué dice (Christian) Di Candia. Acá la persona a la que hay que preguntarle qué está pasando es a (Julio) Pintos”, sostuvo Cossia, veterinario de profesión y que está por publicar el libro Bienestar Animal en Uruguay: Un nuevo impulso para evolucionar.
Rodríguez opinó en esa misma línea y agregó que la Cotryba no debería existir como tal, sino que lo ideal sería que se creara un instituto de bienestar animal con presupuesto y por fuera del MGAP. “Tiene que ver con lo que le mandatamos a hacer a un ministerio. El MGAP trabaja con los animales desde una perspectiva de explotación y regula a los animales como egresos e ingresos. No le podemos pedir que tenga una mirada ética y empática de protección”, apuntó.
Desde el Frente Amplio (FA), en tanto, aseguraron que la Cotryba cuenta con varias falencias, sobre todo a nivel de profesionales capacitados en bienestar animal. Evelyn Segredo, integrante del sector De Frente -liderado por el director del Centro de Información Oficial (IMPO), Gonzalo Reboledo-, aseguró a El Observador que la Cotryba no cumple “ni remotamente un objetivo sobre políticas públicas de bienestar animal”. “Tiene un déficit importante a nivel técnico, profesional, jurídico y financiero”, agregó. El sector De Frente es una de las agrupaciones oficialistas que se embanderó con la causa animalista y que trabajó en temas como la prohibición de las carreras de galgos.
Polémica por representante en la Cotryba
Karina Kokar integra la Plataforma Animalista, una de las organizaciones que lucha por los derechos de los animales. Además, forma parte de Magnolia, la agrupación frenteamplista que lidera Di Candia. La activista consideró “alentador” el mensaje que dio el nuevo intendente respecto a las jineteadas y los cambios a hacer para las próximas elecciones. Además, Kokar es la representante designada por el Poder Ejecutivo para integrar la Cotryba en representación de las protectoras de animales.
Sin embargo, su elección generó molestia en algunas organizaciones que consideran que Kokar no tiene ningún tipo de representación, ya que no hubo una votación o consulta al resto de la sociedad civil. Rodríguez, por ejemplo, señaló que además de la falta de elecciones Kokar no promovió nunca un diálogo entre las diferentes asociaciones animalistas.
