Según confirmaron a El Observador varios profesionales consultados, los promedios históricos de lluvias durante todo mayo arrojan que normalmente llueve entre 100 y 120 milímetros durante ese mes, pero se espera que solo para la próxima semana caigan entre 200 y 250 milímetros en todo el territorio nacional, principalmente al norte del Río Negro, lo que implicará que en una decena de días lloverá más del doble de lo que llueve en todo un mes.
A su vez, el consultor privado en meteorología, Mario Bidegain, señaló que todos los modelos indican que para los departamentos de Artigas, Rivera, Salto y al norte de Tacuarembó se registraron al principio de esta semana la mayor cantidad de precipitaciones del país alcanzando los 200 milímetros. De hecho, en Rivera llovieron en las últimas 24 horas 223 milímetros, lo que provocó inundaciones en varias partes del departamento norteño.
"Es muchísmo lo que ha llovido porque esto representa que llovió más del doble en una semana de lo que corresponde a un mes. Para estas zonas es peligroso, porque estas lluvias que se dieron ayer y fueron abundantes, van a continuar este viernes y a afectar más puntualmente al norte del país", apuntó Bidegain.
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Por su parte, el también asesor en meteorología, José María Rodríguez, dijo a El Observador que desde su perspectiva coincide con las estimaciones de Inumet, sobre todo en lo que tiene que ver con el pronóstico para la semana próxima, ya que, sostiene, habrá lluvias abundantes producto de un importante sistema de baja presión en la región que va a actuar junto a la humedad y el calor.
Según explicó el profesional, la causa de estos fenómenos se da porque "existe un bloqueo en Paraguay, Bolivia y en el centro de Brasil, que produce que los frentes fríos se queden estacionados sobre Uruguay y el este de Argentina, lo que produce una descarga continua de agua".
"Hasta que no se rompa ese bloqueo y entre una corriente de aire fría y seca que limpie toda esta situación no va a haber ninguna variación a corto plazo. Al menos en los primeros 15 días de mayo no se van a ver cambios significativos", auguró Rodríguez, que espera que las lluvias persistan.
Rodríguez explicó que por este exceso de precipitaciones se generan efectos "terriblemente negativos por los problemas sanitarios que aparecen, como enfermedades y plagas". A estos inconvenientes, se suman que las intensas lluvias provocaran inconvenientes tanto para sembrar como para cosechar, traduciendo al agro más problemas de los que ya acarrea producto de la sequía de los últimos meses.
En tanto, Bidegain dijo que en el caso de las zonas más complicadas por la falta de agua por el déficit hídrico que se dio desde noviembre –Río Negro, Paysandú, Soriano, Colonia y Flores- también han tenido en los últimos días lluvias importantes. A pesar de que en el litoral oeste se seguía manteniendo un déficit en la humedad de los suelos, el balance hídrico del mes de abril arrojó que con las lluvias acaecidas hasta el 30 de abril inclusive, se cerró el primer mes con lluvias normales o por encima de lo normal desde noviembre, lo que en principio habría normalizado la situación de los suelos en el campo, al menos en relación a la sequía.
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