Roma ganó el martes por la noche por 3-0 al
Barcelona y remontó el 4-1 encajado en el Camp Nou una semana antes, en una de las noches históricas del club romano.
Las imágenes, difundidas por medio de las redes sociales, mostraron al patrón del conjunto romano, lanzándose de espaldas y vestido a la fuente de los Leones, en el centro de la Piazza del Popolo (plaza del Pueblo).
Aunque el ambiente era festivo, el gesto está estrictamente prohibido en Roma, donde las multas, de € 450 en 2017, sancionan con regularidad a turistas que desean refrescarse o emular la escena de la película La dolce vita donde Anita Ekberg se mete en la Fontana di Trevi con Marcello Mastroianni en el filme de Federico Fellini.
El miércoles por la mañana, Pallotta llamó a la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, para pedir perdón y asegurar que pagará la multa, informó la prensa italiana.
Por la tarde se entrevistó con la alcaldesa. "Quería agradecer al ayuntamiento mi multa bien merecida. Me dejé llevar por la emoción del momento, fue una noche formidable para todos los romanos", explicó a la prensa, con la alcaldesa a su lado sonriente.
Pallotta hizo un llamado para que no se siga su ejemplo "salvo si es para reparar la fuente". Los € 230 mil de la donación servirán para financiar la renovación de la fontana del Panteón.
La de los Leones, en la que se bañó el dirigente, fue renovada en 2015 por € 315 mil, financiados mediante publicidad en las vallas que rodearon los trabajos.
Horas antes, una asociación de consumidores denunció en un comunicado la acción del presidente del club, censurando "un muy mal ejemplo para los millones de jóvenes que siguen el fútbol y a la Roma y que deberían ser educados en el respeto del patrimonio público y de los bienes históricos".