Sevilla, dirigido por Diego Alonso, quedó eliminado de la Champions League tras perder 2-1 el martes contra el Lens, en el estadio Bollaert-Delelis de Francia.
Pese a la mala campaña, el técnico uruguayo seguirá en su puesto porque los dirigentes confían en su trabajo, al menos hasta el sábado cuando Sevilla enfrenta a Getafe, un partido clave para el futuro del entrenador.
El plantel de Sevilla regresó por la madrugada a España y fue recibido por un grupo de hinchas que los insultaron mientras se subían al bus: "sois malísimos", "hijos de puta", "den la cara", fueron algunos de los epítetos que se escucharon.
Los jugadores más insultados fueron Pepe Castro, Del Nido Carrasco, Sergio Ramos y Pedrosa.
Las cámaras del Diario de Sevilla mostraron el momento en que Alonso caminaba, cabizbajo, hacia el ómnibus. Desde que asumió en el club, Alonso suma seis derrotas, con solo dos victorias frente a un equipo regional y otro de Tercera Federación por la Copa del Rey.
Además del respaldo de los dirigentes, el técnico también tiene el apoyo de los futbolistas, según indican los medios españoles.
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