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Su amigo lo mató para robarle el auto: condenaron al asesino y a un cómplice a 24 años de prisión
Dos hombres que asesinaron a un joven de 28 años para robarle el auto en 2022 fueron condenados a 24 años de prisión.
El Área de investigaciones de la Policía determinó que los dos detenidos habían engañado a la víctima para que concurriera al domicilio de uno de los autores.
Fuentes de fiscalía confirmaron que uno de los condenados decía ser amigo de la víctima.
“Fue un caso terrible por lo dramático, porque le costó la vida a un joven de 28 años, por la circunstancia también de que se trata de que uno de los autores del hecho se decía amigo de él, lo cual generó no solamente la mayor indignación en la familia de la víctima, sino un agravante como la alevosía”, indicó el fiscal en entrevista con Subrayado.
Según la filmación de las cámaras de seguridad a las que pudo acceder El Observador, la victima entró caminando al lugar donde después sería asesinado.
Según los investigadores, el joven fue asfixiado con una cadena para robarle el auto que poco después buscaron vender. Posterior al hecho los coautores del asesinato salieron de la finca y se fueron en el auto.
“Son coautores en la medida de que la Fiscalía no pudo determinar cuál de los dos hizo qué tarea en la muerte de la persona. Pudimos determinar que el homicidio requirió la colaboración de los dos”, explicó Negro.
En uno de los teléfonos incautados se encontraron conversaciones donde uno de los agresores vendía el vehículo de la víctima por 35 mil pesos previo a los hechos.
El relato de los hechos
La víctima salió del trabajo –un auxilio mecánico, en el que su padre era el dueño– el viernes del crimen, y se subió al auto en cuestión con $ 6.000, que era la recaudación del día. Tomó la avenida Belloni hacia el sureste y minutos después se encontró con dos hombres,
Lo llevaron hasta la casa de uno de ellos –al que la víctima conocía– y lo asfixiaron con una cadena de hierro. El forense que lo analizó constató que no tenía heridas defensivas. Dejaron el cuerpo escondido en una estructura de ladrillos y envuelto en una frazada.
"De uno de los teléfonos incautados surge que había ofertas concretas por el vehículo, previo incluso a que la persona saliera del trabajo", dijo en ese entonces el fiscal Rodrigo Morosoli en rueda de prensa.
Ellos se fueron en el auto de la víctima y circularon por la ciudad hasta que, la familia del fallecido, alertada por su ausencia, rastrearon el auto por el GPS y le pidieron a unos amigos que lo fueran a buscar.
