Tristán Narvaja: mil maravillas y nuestros recomendados

Impacta lo superlativo en todo: muy antiguo, mucha gente, muy desordenado, muy orignal, muchos productos, ¡de lo mejor y de lo peor! Pero un paseo divino por demás.

Como visitante y si me pongo en turista en ciudad propia, agradecería algunos "toques" que no requeririan mucha inversión, como por ejemplo algo de señalización o decoración urbana y sobre todo una sectorización más ordenada; la parte de alimentos junta, la de repuestos, la de decoración en un solo lugar, de forma de crear circuitos. Si bien tiene la ventaja de ser más variado con la modalidad actual, si uno va buscando cosas específicas siempre queda la duda de que hay lugares que no visitaste.

Igualmente es una alternativa a los remates que son más formales y requieren otros tiempos de coordinaciones, y uno puede hacerse realmente con joyitas originales y realmente en cualquier rubro: desde valijas antiguas, vajilla, cristalería, ruedas de goma, radios o teléfonos de los de antes, revestimientos de casas demolidas, marcos de cuadros, accesorios de bronce, raquetas de tenis con sus encuadres de madera, etcétera.

Es un recurso muy valorado especialmente hoy que las modas de integrar lo vintage o lo antiguo a ambientaciones de casas o comercios, dan toques muy personales a cualquier ambiente.