Los Patriots lo hicieron. En lo que será recordado como la final más increíble de la historia del fútbol americano de la
NFL. New England Patriots ganó el Super Bowl 51 tras superar a Atlanta Falcons 34-28 en el alargue.
Las cifras así lo dicen: fue la mayor remontada en la historia del Super Bowl, de 25 puntos, en la primera final en toda la historia que fue al suplementario. La anterior remontada en una final era de 10 puntos, y también la habían protagonizado los Patriots. Perdían 28-3 en el tercer cuarto, pero lo lograron
Atlanta dominó absolutamente todo durante tres cuartos. Apoyados en una defensa notable, que atrapó cinco veces a Tom Brady, un ataque por tierra que empezó imparable, y un Matt Ryan que mostró su talento como en toda la temporada. Los Falcons tenían absolutamente todo controlado y se encaminaban a una victoria tan cómoda como la de la final de la Conferencia Nacional, cunado llegaron a ir ganando 31-0 ante Green Bay Packers.
Pero cuando todo parecía perdido, los Patriots sacaron su casta. Primero fue un touchdown que casi nadie le dio importancia, porque fallaron la conversión: 28-9. Luego un gol de campo que dejaba gusto a muy poco porque apenas era un 28-12 ya entrado el último cuarto.
New England tenía que conseguir dos touchdowns y dos conversiones de dos puntos, algo improbable, e impedir que la mejor ofensiva de toda la liga se quedara en blanco. Imposible, por donde se lo vea.
Pero si hay un deporte hollywoodense, este es el fútbol americano. Primero un sack al mariscal seguido de pelota recuperada. Touchdown, 28-20. Luego una increíble ataque de Atlanta que se queda sin anotar. Y luego un drive épico, incluida la atrapada imposible, cuando todo se acababa para los Patriots. Esta jugada quedará sin duda entre las mejores de la historia.
Touchdown. 28-28. Y de pronto los dioses deportivos se fueron con Tom Brady, y dejaron solo a Matt Ryan y sus Atlanta Falcons. Por eso hasta el azar estuvo con los Patriots: ganaron el sorteo, tuvieron la primera pelota y la chance de atacar y ganar el partido.
El touchdown de la victoria
Con eso, los Patriots, comandados por su mariscal Tom Brady y su entrenador Bill Bellichick, se consagraron por quinta vez como campeones de la NFL, cimentando a los dos como los mejores de la historia en sus puestos, y a New England como la franquicia más dominante de las últimas décadas.
Pero, como dijo su propietario Robert Kraft en la premiación, ninguno será como este, cuando lograron lo imposible.
Lady Gaga
El show del entretiempo tuvo una exuberante actuación de Lady Gaga, que incluyó un mensaje de unidad a Estados Unidos, en el medio de la división por las medidas del gobierno de Donald Trump.