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Yao Cabrera fue condenado a cuatro años de cárcel por el delito de "reducción a la servidumbre"
El influencer uruguayo Yao Cabrera fue condenado este jueves por un tribunal federal argentino a cuatro años de cárcel por el delito de reducción a la servidumbre.
Según informó Infobae en base a un fallo al que accedió el medio, Cabrera se mantendrá en libertad por determinación de la jueza Nadia Flores Vega, a cargo del Tribunal Oral Federal N°3 de San Martín, hasta que la condena se formalice. Por el momento, solo hay una víctima en el caso, constituida como querellante a partir de un expediente que se abrió en 2020.
El uruguayo deberá pagar además 6 millones de pesos argentinos a la víctima.
Por otro lado, la justicia argentina ordenó más investigaciones sobre Cabrera para determinar la existencia de más delitos de orden impositivos o financieros.
Según el documento de la causa, Cabrera contrató como editora de videos a la víctima, Giovanna De Mitole e identificada en el texto con las iniciales GBDM, entre diciembre de 2019 y enero de 2020.
"A tal propósito, le prometió un salario y proporcionarle vivienda y comida. Sin embargo, en este período, mientras residían con otras personas en el inmueble en el lote 125 del barrio San Marcos (Escobar), Cabrera Rodríguez la sometió a precarias condiciones laborales. En concreto, jornadas de labor extensas (más de doce horas y a veces un día entero sin descanso); se amenazaba con la imposición de descuentos (multas) -efectivizadas en una ocasión- o la expulsión si no se cumplían las condiciones (grabar vídeos con ciertas personas, replicar material en redes sociales y normas de convivencia)", se puede leer en el texto difundido por el portal argentino.
Además se especifica que se le "proporcionaba la comida en mal estado y cantidades insuficientes; solo podía ausentarse de la vivienda los domingos siempre y cuando hubiese concluido con sus labores; y nunca se le pagó el dinero prometido. De este modo. Cabrera Rodríguez habría colocado a GBDM en una situación de servidumbre, aprovechándose de su vulnerabilidad preexistente”.
Los antecedentes
La denuncia contra Cabrera fue presentada en 2020 por Jorge Zonzini, y el fiscal federal en lo Criminal de San Martín, Eduardo Codesido, había pedido cuatro años y medio de prisión para el influencer por el delito de "trata de personas con fines de explotación sexual y laboral". La defensa de las víctimas, por su parte, quería que se lo condenara con la pena máxima de 12 años.
El desencadenante de la investigación fue la denuncia hecha en 2018 por Zonzini en el Juzgado Federal de Campana, a cargo del juez Adrián González por delitos sexuales contra niños y adolescentes, asunto que actualmente está siendo tratado en el juzgado de garantías de Escobar.
A esa primera denuncia se le agregó la realizada por De Mitole y Joaquín Apesteguia en 2020, exempleados de la organización liderada por Cabrera llamada "Viral/Wifi Team", por múltiples delitos, entre ellos estafas a niños vulnerables, abuso sexual, corrupción y facilitación de la prostitución a menores de edad.
De Mitole, una de las denunciantes de la segunda causa, trabajaba para el youtuber como diseñadora gráfica y también hizo algunas apariciones en los videos de Cabrera. Junto con Apesteguia, la diseñadora es representada ante la justicia por Ramón Arigós quienes, según informó Zonzini, presentaron "pruebas irrefutables" de los delitos cometidos por "Yao Cabrera y sus secuaces".
"Yo fui una esclava en la ‘Mansión Wifi’ y Yao era quien daba las órdenes de todo lo que pasaba ahí”, declaró De Mitole a Revista Noticias a principios de 2022.
En agosto de 2022 la Secretaría Penal IV de la Cámara Federal de San Martin determinó que el caso iría a juicio oral y público, y dispuso el procesamiento de Cabrera sin prisión preventiva y con un embargo por la suma de tres millones de pesos argentinos, según señala el expediente.
